Liberate de las ideas negativas o que te quieren inducir a hacer algo malo

 

Siento mucho que estés experimentando esos pensamientos negativos. Es completamente normal que todos, en algún momento, tengamos pensamientos intrusivos o oscuros, pero lo más importante es cómo los manejamos. Aquí hay algunas estrategias que podrían ayudarte a lidiar con esos pensamientos y a reducir su impacto en ti:



  1. Reconocer que los pensamientos no definen quién eres: A veces, los pensamientos negativos pueden hacernos sentir como si fueran una parte de nosotros, pero la realidad es que solo son pensamientos. No son indicativos de lo que realmente deseas o de quién eres como persona.

  2. Practicar la auto-compasión: En lugar de juzgarte o sentirte culpable por tener esos pensamientos, intenta tratarlos con comprensión. Todos los seres humanos tienen momentos difíciles, y ser amable contigo mismo en estos momentos puede hacer una gran diferencia.

  3. Desafiar los pensamientos negativos: Pregúntate a ti mismo si esos pensamientos son realmente ciertos o si hay otra forma de ver la situación. A veces, nuestra mente puede exagerar o distorsionar las cosas, y desafiar esos pensamientos puede ayudarnos a verlos con más claridad.

  4. Mindfulness o meditación: Practicar mindfulness (o atención plena) puede ser muy útil para gestionar los pensamientos negativos. El mindfulness nos enseña a observar nuestros pensamientos sin aferrarnos a ellos, dejándolos ir como nubes que pasan por el cielo. Meditar también puede ayudarte a calmar tu mente y reducir el poder de esos pensamientos.

  5. Distracción saludable: A veces, lo mejor es dar un pequeño respiro a la mente haciendo algo que te guste o te relaje, como leer, escuchar música, hacer ejercicio, o hablar con alguien en quien confíes. La distracción puede ayudar a romper el ciclo de pensamientos negativos.

  6. Hablar con un profesional: Si estos pensamientos continúan siendo frecuentes o muy perturbadores, es importante buscar ayuda profesional. Los psicólogos o terapeutas pueden proporcionarte herramientas más específicas, como la Terapia Cognitivo-Conductual (TCC), para ayudarte a manejar mejor los pensamientos negativos.

  7. Establecer una rutina saludable: Mantener una rutina equilibrada, que incluya ejercicio, descanso adecuado y actividades que te gusten, puede ayudar a reducir la frecuencia y la intensidad de los pensamientos negativos.

Recuerda, no estás solo/a en esto y hay formas de manejar esos pensamientos. Si alguna vez sientes que los pensamientos negativos son demasiado intensos o amenazantes, te recomiendo hablar con un profesional de inmediato. Tu bienestar es lo más importante.